Un acogedor remanso

Viernes 27 de diciembre | El paseo de la Isla del Puerto, renovado y cuidado al detalle sobre la costa de Concepción del Uruguay, regala una de las mejores vistas del río Uruguay que ofrece el sinuoso litoral este de Entre Ríos. Desde esa privilegiada perspectiva se aprecian los diferentes matices que adopta el agua amarronada, según el momento del día y los dictados del sol. Al fondo, la franja verde de la ribera uruguaya se asocia al atractivo cuadro bucólico.

 

El recorrido por la costanera resulta el mejor estímulo antes de emprender el insoslayable circuito del casco histórico de la ciudad. La impronta de los caudillos entrerrianos y los cimientos de la organización nacional empiezan a aflorar alrededor de la pirámide de la plaza Francisco Ramírez. Es el hito que marca el primer paso del itinerario a pie, que se extiende al Palacio Municipal, el Colegio Nacional del Uruguay, la Basílica de la Inmaculada Concepción -donde se conservan los restos de Justo José de Urquiza-, la Sala de Malvinas Daniel Sírtori y los museos Delio Panizza y Artemio Alisio.

 

Camino a los centenarios edificios del Palacio Texier y el hotel París, la calle peatonal Rocamora sugiere una escala para llevarse a casa una artesanía local como mejor suvenir. Más adelante, las esculturas del bulevar Irigoyen remiten al aporte de los colonizadores al desarrollo de estas tierras prósperas.

 

El circuito que desanda el pasado de Concepción del Uruguay resguarda una de sus piezas más valiosas a 28 kilómetros hacia el oeste por la ruta 39, donde se levantan las imponentes instalaciones del Palacio San José. Dos torres simétricas, columnas de estilo toscano, grandes patios con aljibes, una capilla, parques, jardines, 17 habitaciones y la Sala de los Espejos mantienen los brillos de la señorial residencia del general Urquiza.

 

A un costado de la ruta 14, el complejo termal presenta un perfil diferente de esta ciudad amable, marcada a fuego por el peso de la historia.